La alopecia es un padecimiento que puede resultar muy difícil para cualquiera que lo sufre. Empezar a perder pelo de forma descontrolada, lleva a un cuero cabelludo despoblado, con zonas calvas a las que no es fácil enfrentarse. Ante esta situación, es posible desarrollar todo tipo de malestares emocionales, además de una gran necesidad por superar este problema. Entre las opciones existentes para dar solución a la calvicie, el trasplante capilar es la mejor alternativa. Pero muchos pacientes suelen preguntarse ¿cuánto duele un injerto capilar? A continuación, te lo diremos.
El injerto de pelo es un proceso quirúrgico y, por tanto, puede generar angustia en los pacientes debido al dolor que llegarán a sentir. En las consultas de tricología, es normal atender todo tipo de dudas relacionadas a las molestias previas, durante y después de la intervención. Los individuos sienten gran temor por el proceso de implantación y el postoperatorio. Sigue leyendo y descubre las respuestas a esas preguntas que tanto te atormentan. Si quieres someterte con tranquilidad a tu injerto capilar, debes tener en cuenta que es una técnica indolora y aquí te explicamos por qué.
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¿Qué es el injerto capilar?
El injerto capilar es una cirugía netamente estética, con la que es posible devolver cabello del cuero cabelludo, que se ha perdido debido a problemas genéticos. Para llevarlo a cabo, se hace uso del propio pelo del paciente, garantizando con ello un aspecto muy natural. Es aplicado con anestesia local y asegura al individuo que no existirá rechazo alguno a este nuevo pelo. El injerto se mantendrá en el cuero cabelludo, sin posibilidad de volver a presentar algún tipo de caída.
Es después de los 30 años, la edad más adecuada para someterse a esta operación. Durante este tiempo, la alopecia habrá alcanzado un estado estabilizado, garantizando mejores resultados. Es necesario en este proceso, rapar la cabeza para obtener los folículos y transferirlos hasta la zona afectada por la calvicie. Con ello es posible obtener los tallos capilares más saludables. Solo se necesita afeitar el pelo de la parte donadora, pero por asuntos de estética, se suele retirar toda la cabellera.
El trasplante de pelo se lleva a cabo utilizando alguna de las siguientes técnicas:
- FUE: es la extracción folicular por unidades. Se trata de un método vanguardista, que permite superar la alopecia de manera efectiva. Puede ser aplicado tanto en hombres como en mujeres. Se trata de una técnica poco intrusiva, en la que se extraen los folículos de la zona donante y se colocan de forma individual en la parte calva.
- FUT: se trata de la forma más tradicional de injertar pelo de una zona a otra. Con el método FUT, se toma una tira del cuero cabelludo y de ella se dividen las unidades foliculares. Esta franja que se extrae, puede medir alrededor de 25 cm de largo. Requiere una incisión con bisturí y posterior sutura. Por lo que su recuperación puede ser más lenta. Sin embargo, resulta muy efectiva para cubrir grandes zonas calvas.
¿Cuánto puede doler cada fase del injerto capilar?
El injerto capilar es conocido por ser un procedimiento poco invasivo. Para realizarlo, el experto efectúa diminutas incisiones en el cuero cabelludo, en las que a continuación, insertará las unidades foliculares. Estos cortes requieren un proceso de sanación para permitir la buena evolución de los injertos. El paciente deberá atravesar las siguientes fases en su intervención:
- Diagnóstico: es el momento en el que el profesional estudia profundamente el caso. En esta etapa se determina la clase de alopecia que se padece. También se establece si el paciente es apto para someterse a un injerto capilar.
- Preoperatorio: al momento de realizar el preoperatorio, es necesario brindar toda la información requerida al profesional. Esto servirá para crear el mejor plan de acción para dar solución a la calvicie. En esta etapa, el especialista indicará normas al paciente, que deben seguirse para prepararse bien para la cirugía.
- Cirugía: es en la cirugía cuando se efectúa la colocación de los folículos pilosos. Para ello se utiliza la técnica de extracción más adecuada, dependiendo de las características de la alopecia del paciente.
- Postoperatorio: para este momento es necesario seguir unos cuidados indicados por el cirujano. Lo que ayudará a que los injertos tengan el desarrollo adecuado durante la recuperación.
Cada fase mencionada puede provocar algún tipo de dolor. Esto dependerá de cada persona, su umbral de dolor, las habilidades del cirujano al momento de implantar y el cumplimiento de los cuidados postoperatorios.
¿Duele el injerto capilar?
La principal preocupación de los pacientes en consulta, es el posible dolor que esta cirugía pueda provocar. Es comprensible sentirse de esta manera, puesto que cualquier cirugía es angustiante. Sin embargo, puedes sentirte tranquilo, ya que se trata de una operación muy simple. Siempre que sea realizada por un cirujano debidamente preparado, con muchos casos atendidos y en una clínica de calidad.
La realización del injerto capilar no es dolorosa en absoluto. Antes de comenzar la intervención, el paciente será adormecido con anestesia local. Por lo que, durante el tratamiento, las incisiones, extracciones e implantación, no es posible sentir dolor. La única molestia que deberá soportar el paciente, será el pinchazo inicial de la colocación de la anestesia.
¿Duele la anestesia en el injerto capilar?
Teniendo en cuenta lo anteriormente dicho, es posible que sientas angustia por el pinchazo de la anestesia. Sin embargo, es un paso necesario para cualquier cirugía. Pero, afortunadamente las agujas utilizadas solo provocan molestia, más que dolor. En algunos casos se puede utilizar un tipo de pre anestesia, libre de agujas. Se trata de una crema tópica que insensibiliza la zona a tratar, para hacer que todo el proceso sea indoloro.
Con o sin aplicar una pre anestesia, este paso del proceso es muy rápido. Algo que vale la pena atravesar, por toda una vida sin calvicie.
¿Qué se siente en el quirófano durante la cirugía?
Tal como se ha dicho a lo largo del post, el injerto capilar no es un proceso doloroso. Al momento de efectuar este tratamiento, no se percibe dolor por daños en el cuero cabelludo. Es común sentir una especie de hormigueo en la zona tratada. El pinchazo de la anestesia es el único factor molesto al que los pacientes anteriormente atendidos, hacen referencia. Son sensaciones soportables y que con la recuperación, desaparecerán.